Waching daily Jan 30 2019

El Norte es el más antiguo y el más grande de los Siete Reinos,

pero la Casa Stark no siempre lo ha tenido.

Cuando Bran, el Constructor, levantó Winterfell y fundó nuestra línea,

fuimos vasallos de los Barrow Kings,

quienes afirmaron ser descendientes del Primer Rey

y, por lo tanto, dominio sobre todos los Primeros Hombres.

Pero después de la Larga Noche, fue nuestra casa la que construyó el Muro

y estableció la Guardia de la Noche para proteger los reinos de los hombres

mientras nuestro rey estaba sentado en su carretilla.

Mis ancestros finalmente se rebelaron,

haciendo lo que los cantantes llaman la Guerra de los Mil Años

para liberar nuestras tierras.

Otras familias se unieron a nosotros, reconociendo que el Norte

es una tierra fría y dura y que necesitaba un rey que sirviera a su gente antes que él.

Finalmente, el último Rey Barrow dobló la rodilla

y la Casa Stark se convirtió en los Reyes del Invierno.

Sin embargo, solo éramos reyes de nombre,

porque para entonces el Norte se había fracturado en muchos reinos

pequeños y mis antepasados ​​lucharían por volver a unirlo

durante miles de años.

Rodrik Stark luchó contra el señor Ironborn por Bear Island

y se lo otorgó a House Mormont cuando ganó.

Un hijo menor de nuestra familia, Karlon Stark,

ganó su propia fortuna después de que él rechazó una rebelión

y fundó la Casa Karstark, una de las más poderosas del Norte.

Cuando los Manderly fueron exiliados del Alcance,

mis antepasados ​​los protegieron y les dieron una casa

en la boca del Cuchillo Blanco a cambio de mantener el río

contra piratas e invasores.

Ahora son una de las casas más ricas del norte.

No soy tan ingenua para fingir que todo el Norte

acogió con satisfacción las reglas Stark

El último Rey Warg fue asesinado en Sea Dragon Point

junto con todos sus hijos y bestias.

El último Marsh King murió a manos del rey Rickard Stark

y la House Reed ha mantenido desde entonces los pantanos del Cuello.

Casas Greenwood, Towers, Amber, Frost ...

ninguna sobrevive hoy en día como algo más que nombres en viejos libros polvorientos.

Pero mis ancestros nunca quisieron destruir

la raíz y el tallo de sus enemigos.

The Umbers of Last Hearth y Glovers of Deepwood Motte doblaron la rodilla

y se convirtieron en leales vasallos de la Casa Stark.

Los reyes rojos de la casa Bolton usaban capas hechas con las pieles de los príncipes Stark

que habían desollado,

y uno de los Bolton era incluso conocido como el Redarm

porque le gustaba hundir un brazo en el vientre de los cautivos Starks

y sacar sus entrañas con su mano desnuda

El Norte merecía ser limpiado de ellos.

Sin embargo, mis antepasados ​​ los perdonaron después de su derrota

porque creían que el Norte ya no podía permitirse luchar por sí mismo.

El tiempo pronto les demostró lo correcto.

Cuando los Andales barrieron Westeros,

destruyeron todos los reinos de los Primeros Hombres,

excepto el Norte.

Cada uno de los reinos del sur luchó contra los invasores por su cuenta,

pero el Norte luchó como uno solo.

Cuando los Andales intentaron navegar con el Cuchillo Blanco,

los Manderly cayeron en sus barcos.

Cuando los Andales intentaron hacer avanzar un ejército a través del Cuello,

las Cañas cayeron sobre sus soldados.

El rey Theon Stark incluso envió su propio ejército a la patria andal en busca de venganza

y mató a cientos de guerreros andals.

Cuando regresó, plantó sus cabezas en espigas a lo largo de nuestras costas.

Una advertencia a otros posibles conquistadores.

La advertencia fue atendida durante miles de años,

hasta Aegon el Conquistador.

El sur ya había caído sobre Aegon y sus dragones.

Sólo quedó el norte.

Mi antepasado, el rey Torrhen Stark,

marchó hacia el norte hasta el Tridente y contempló el ejército de Aegon,

más grande que el de Torrhen por la mitad y con tres dragones dando vueltas por encima.

Muchos bannermen del norte querían atacar de todos modos,

alegando que el valor del norte duraría un día

Otros querían volver a Moat Cailin y ponerse de pie allí.

Pero Torrhen había oído cómo los ejércitos de la Roca y el Alcance

habían ardido en el Campo de Fuego

y habían visto los fuegos brillar bajo los escombros de Harrenhal.

Se arrodilló y colocó su antigua corona como los pies de Aegon

y se levantó como un rey no más que el Señor de Invernalia

y el Guardián del Norte.

Algunos norteños todavía se burlan de mi antepasado como "El rey que Rodilla",

olvidando que debido a Torrhen están vivos hoy para burlarse.

Sus antepasados ​​no dejaron sus huesos quemados en el Tridente

y sus espadas retorcidas no llenaron el nuevo trono de Aegon.

Ahora muchos dicen que la Casa Stark ya no existe

y la casa Bolton tiene el norte

Pero el Norte recuerda quién lo unió,

el Norte recuerda quién lo defendió

y el Norte recuerda quién lo robó.

Hace mucho tiempo, mis ancestros perdonaron a los Bolton,

confiando en sus juramentos de fidelidad.

Voy a corregir ese error.

Incluso el Norte puede olvidar cuando no queda nada para recordar.